La estética a evolucionado con el pasar de las épocas, lo que antes era considerado armónico y agraciado varía con respecto a los parámetros de belleza del mundo moderno. Ciertamente cada individuo es distinto, pero la constante búsqueda de la perfección y atractivo físico es un factor presente en cada persona a través de todos los periodos de la historia. En la sociedad actual, la simetría facial es un conjunto de rasgos considerados atractivos, para las personas que se sienten insatisfechas con su apariencia por diversos motivos, la cirugía estética ofrece una alternativa para establecer un aspecto más estilizado, cercano al ideal de belleza.
¿Qué es la Rinoplastía?
La rinoplastía es una de las intervenciones quirúrgicas más frecuentes en el campo de la cirugía estética, se trata de una operación para modificar la forma de la nariz, suavizar o resaltar características de la misma.
Este método quirúrgico permite definir la apariencia del dorso nasal, estrechar las fosas nasales, y cambiar el ángulo existente entre la nariz y el labio superior. La rinoplastía además es capaz de corregir algunos problemas respiratorios que afectan a pacientes con ronquidos nocturnos o anomalías congénitas en la anatomía nasal, como la proboscis laterales o nariz tubular.
¿Para qué sirve la Rinoplastía?
El objetivo de este tipo de intervenciones estéticas es mejorar la apariencia del rostro, logrando una estructura facial más atractiva, la rinoplastía es un proceso minucioso orientado hacia la búsqueda de resultados lo más natural posible. Muchos pacientes se encuentran motivados a realizar la intervención debido a problemas relacionados con la funcionalidad del apéndice nasal, como la insuficiencia respiratoria causada por pólipos y sinusitis.
¿Qué puede esperar el paciente?
Las técnicas quirúrgicas utilizadas en la rinoplastia son variantes, directamente ligadas al efecto que cada paciente desea lograr, muchas veces las personas tienen pensamientos poco realistas acerca del resultado post operatorio, por esto, surgen ideas imperativas poco claras y sin información concreta sobre el procedimiento, por eso el individuo debe consultar a los especialistas con cualquier duda. La rinoplastia promete excelentes resultados para personas que buscan una mejoría tanto en el aspecto de su rostro como en su confianza.
¿Cómo se realiza la Rinoplastía?
Los pacientes candidatos a una rinoplastía deben tomar conciencia sobre la importancia y seriedad de este método quirúrgico, muchos cirujanos plásticos prefieren no realizar el procedimiento sino hasta que la persona este en la edad correcta (18 o más) y sea capaz de tomar decisiones acertadas por sí misma. El proceso comienza con un chequeo de rutina por parte del especialista médico, de ser necesario se solicita una Tomografia de nariz y senos paranasales, después de corroborar el buen estado de salud de la persona que será intervenida, se procede a programar la fecha de la cirugía.
La rinoplastía se realiza en el quirófano de la clínica u hospital, bajo anestesia general o anestesia local más sedación, las opciones del paciente serán discutidas previamente con el médico, si la persona se somete a anestesia general, estará dormido durante la operación, si por el contrario, elige la anestesia local más sedación, su cuerpo permanecerá relajado y no sentirá dolor.
Durante la cirugía se hace una pequeña incisión en la piel debajo de los orificios nasales para separarla de su soporte, dejando expuestos el hueso y cartílago, a partir de ese momento, el cirujano plástico procederá a moldear la nariz, finalmente la piel es colocada sobre las estructuras nasales internas nuevamente, se reabren las vías respiratorias asegurando su funcionalidad, por último, la incisión es suturada.
Una vez realizada la rinoplastía se coloca sobre la nariz una especie de férula para mantener su nueva forma, se pueden usar tapones para obstruir ambos orificios nasales con el fin de amoldarlos y evitar el sangrado.
¿Cómo es la recuperación?
En la mayoría de los casos la primera semana después de la operación es dolorosa, sin embargo, las molestias e hinchazón pueden disminuir con los analgésicos prescritos por el cirujano estético.
Las primeras 24 horas el paciente se encuentra en un estado sumamente delicado, los edemas y hematomas como respuesta del organismo a la intervención se hacen visibles, acompañados de dolor en las regiones adyacentes a la nariz y un leve sangrado en ella, el paciente no deberá sonarse con fuerza para que los tejidos cicatricen adecuadamente, prevenir un golpe o lesión en la cara después de la cirugía es primordial.
Al cabo de 2 semanas se retira el yeso, el paciente se sentirá mucho mejor y podrá volver a sus actividades normales manteniendo el protocolo de cuidados indicados por el médico, aún así, existen algunas recomendaciones básicas para no contraer infecciones como lo son evitar visitar playas o piscinas durante 2 o 3 semanas.
Es importante no someter al cuerpo a actividades extenuantes durante la recuperación de los capilares nasales, el aumento de la circulación sanguínea después de una rinoplastia es riesgoso, puesto que, podría causar hemorragias. Durante los primeros días después de la cirugía, es fácil olvidarse que el aspecto de la nariz va a mejorar, la sanación total es gradual y tardará aproximadamente 1 año para ver los resultados definitivos.
El doctor recomendará el uso de lentes oscuros durante al menos dos semanas para evitar el contacto directo de la luz solar y del viento. Las actividades laborales y escolares pueden ser retomadas de una a dos semanas después, pero se debe poner especial cuidado en no realizar actividades físicas o extenuantes durante al menos tres semanas. Es importante que no se esfuerce el ojo leyendo o centrando la vista en pantallas de computadoras, televisión o teléfonos. Debe evitar estiramientos fuertes de los músculos faciales como sonrisas excesivas o bostezos, ya que estos pueden ocasionar sangrados. Si ocurre, debe consultar con el médico inmediatamente.
¿Cuáles son los riesgos de la Blefaroplastía?
Siempre que la intervención sea realizada por un cirujano estético experimentado, el paciente no debería sufrir ninguna complicación, sin embargo, en ciertos casos se presentan síntomas poco habituales que bien pueden ser tolerados hasta que desaparezcan, o se recurra al médico para que ofrezca un tratamiento, entre estos están:
- Dificultad para cerrar los ojos al dormir.
- Visión borrosa.
- Cicatrices hipertroficas.
Para estos síntomas el especialista puede sugerir la colocación de compresas de hielo en el área manteniendo la cabeza elevada, o medicación. En casos extremos algunos pacientes han presentado las siguientes afecciones:
¿Cuáles son los Riesgos?
En todos los procesos quirúrgicos existe un gran riesgo, el cual podría presentarse en diferentes etapas de la operación, luego de la intervención no se descartará la posibilidad de algunos efectos secundarios causados por la anestesia o cambios en la presión sanguínea. La rinoplastía no se escapa de sufrir algún incidente durante su proceso.
Quizás el riesgo más considerable durante la operación sea la ruptura de los pequeños vasos sanguíneos que se encuentran debajo de la piel, provocando una hemorragia nasal que podría causar una perdida excesiva de sangre, por otra parte, si los cuidados post operatorios no son cumplidos estrictamente, el paciente se encontrará expuesto a agentes patógenos ambientales, estando el cuerpo vulnerable y en proceso de rehabilitación, una infección propagada en el organismo puede convertirse en una enfermedad grave.
En esencia las rinoplastías son procedimientos complicados de sumo cuidado, que deben ser llevados a cabo por profesionales médicos. El Dr. José Antonio Meré, especialista en Medicina Estética en Querétaro cuenta con amplia experiencia en la realización de éste procedimiento estético. Si están interesados en obtener más información y desean programar una cita, es necesario llenar el siguiente formulario presentado.
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